Estreno 15.08.2025

Verano musical en Kufstein

La historia de Carmen: orígenes y reinterpretación

Carmen y Don José figuran entre los amantes más famosos de la literatura universal, junto a Romeo y Julieta, Tristán e Isolda o Don Juan y Donna Anna. Carmen, en particular, se ha convertido en una figura simbólica: autodeterminada, fascinante y peligrosa. Tiene su origen en la novela Carmen de Prosper Mérimée, que la publicó en 1845. Se inspiró en una historia que supuestamente le contó la condesa María Manuela de Montijo durante un viaje por España. Mérimée convirtió al personaje en una gitana amante de la libertad, misteriosa e imprevisible.

La novela se publicó en un diario de viajes para la clase media culta, que buscaba impresiones exóticas y distanciamiento cultural. La narración se escenificaba como una mezcla de diario de viaje y observación etnográfica, una forma sofisticada de satisfacer la curiosidad por lo extranjero.

Sin embargo, Carmen sólo se hizo mundialmente famosa gracias a la ópera de Georges Bizet, estrenada en París en 1875. El libreto de Ludovic Halévy y Henri Meilhac se tomó algunas libertades: Se suprimieron personajes como García, el marido de Carmen, y se reinventaron otros, como Micaela. El torero Escamillo, personaje secundario en la novela, se convirtió también en protagonista. Desde entonces, Carmen no sólo se ha convertido en una figura literaria, sino también en un mito musical: el sonido de su nombre evoca inmediatamente melodías.

El tratamiento de la música por parte de Gasa Valga es sorprendente. En lugar de basarse en una realización puramente clásica, recurre a un paisaje sonoro de múltiples capas: además de los conocidos arreglos de las famosas melodías de Bizet, también incorpora estilos musicales tradicionales españoles, como el flamenco, canciones populares o elementos rítmicos del área cultural andaluza. El resultado es una textura musical viva que fundamenta la historia y, al mismo tiempo, abre nuevos espacios emocionales.

Esta combinación de tradición operística clásica y sonidos folclóricos refleja el conflicto interior de la protagonista: la tensión entre el orden social y la libertad individual, entre la convención y el instinto. Gasa Valga hace un uso selectivo de esta diversidad musical para realzar la profundidad emocional de su interpretación de Carmen y hacer tangibles a los personajes en todas sus contradicciones.

CARMEN

Numerosos artistas de disciplinas muy diferentes -desde la literatura, la música y el teatro hasta el cine, la pintura y la moda- han explorado la figura de Carmen a lo largo de los años. Su complejidad, sus contradicciones y su libertad radical la convierten en un tema fascinante que se reinterpreta y reinterpreta constantemente. A veces aparece como una mujer fatal, a veces como un símbolo de la autodeterminación femenina, a veces como una víctima de las condiciones sociales. Este carácter cambiante es una de las principales razones por las que Carmen no ha perdido ni un ápice de su fascinación desde hace más de 150 años.

Enrique Gasa Valga también se acerca a la figura icónica a su manera. En su producción, entrelaza elementos del modelo literario de Prosper Mérimée con motivos de la ópera de Bizet y los utiliza para desarrollar una forma narrativa coreográfica independiente. Ve a Carmen no sólo como una figura dramática, sino como un símbolo de la pasión, la rebelión y el anhelo de libertad. Con movimientos claros, imágenes intensas y un lenguaje corporal cargado de emoción, crea una experiencia escénica que hace tangible el material de una forma inusual y directa.

El tratamiento de la música por parte de Gasa Valga es especialmente sorprendente. En lugar de basarse en una realización puramente clásica, recurre a un paisaje sonoro de múltiples capas: además de los conocidos arreglos de las famosas melodías de Bizet, también incorpora estilos musicales tradicionales españoles, como el flamenco, canciones populares o elementos rítmicos del área cultural andaluza. El resultado es una textura musical viva que fundamenta la historia y, al mismo tiempo, abre nuevos espacios emocionales.

Esta combinación de tradición operística clásica y sonidos folclóricos refleja el conflicto interior de la protagonista: la tensión entre el orden social y la libertad individual, entre la convención y el instinto. Gasa Valga hace un uso selectivo de esta diversidad musical para realzar la profundidad emocional de su interpretación de Carmen y hacer tangibles a los personajes en todas sus contradicciones.

@Otmar Mosbacher

COREOGRAFÍA Y DISEÑO = Enrique Gasa Valga

IMAGEN ESCÉNICA = Helfried Lauckner

COSTUMBRE = Birgit Edelbauer-Heiss

LUZ = Manfredi Michelazzi

DIRECCIÓN TÉCNICA = Gabriel Marseglia

EQUIPO ARTÍSTICO

CARMEN, una gitana = Alice Amorotti / Sandra Chamochumbi Castro

DON JOSÉ, un soldado = Martin Segeta / Gabriele Tamolli

ESCAMILLO, un matador = Sandra Chamochumbi Castro / Chiara Malavasi

ZUNIGA, Don José Supervisor = Locke Venturato

MICAELA, prometida de Don José = Camilla Danesi

GARCIA, marido de Carmen / Taurus = Gabirele Tamolli / Martin Segeta

ORAKEL = Sayumi Nishii

ENSEMBLE

AUDIENCIA / PERIODISTAS / SOCIEDAD

Alice Amorotti, Sandra Chamochumbi Castro, Emma Frandino, Ayda Frances Güneri, Chiara Malavasi Sayumi Nishii, Matthew Humphreys, Mitsuru Ito, Gabriel Marseglia, Martin Segeta, Gabriele Tamolli, Locke Venturato

CAST